Tour guiado de la Torre Eiffel

La Torre Eiffel, una torre de celosía de hierro forjado construida en 1889, es una de las estructuras más reconocidas del mundo en la actualidad. Debe su nombre a Gustave Eiffel, ingeniero cuya empresa construyó la torre. Mide unos colosales 3.063 metros y, en el momento de su construcción, era la estructura humana más alta del mundo. Los visitantes pueden acceder a tres niveles de la torre. Recibió numerosas críticas antes de su construcción, debido a su diseño y a la creencia de que no era factible. Sin embargo, una vez construida, la mayoría de los manifestantes cambiaron de opinión y, en la actualidad, se ha convertido en un icono cultural mundial.

Al primer y segundo nivel se accede por una escalera de 300 peldaños cada una. Hay un restaurante en cada nivel, y la mayoría de los visitantes no van a los niveles superiores. Durante 2015, 6,91 millones de personas visitaron la Torre Eiffel, y una media de 25.000 personas la visitan cada día. Esto la convierte en el monumento de pago más visitado del mundo, y casi cualquiera que visite París tendrá la Torre Eiffel en su itinerario.

Una vez reunidos en el punto de encuentro, comenzará tu tour por la Torre Eiffel. Con un máximo de 25 personas por grupo, el tour será personalizado. Sáltate las largas colas que se forman a diario en el exterior de esta atracción mundialmente famosa, con una entrada de acceso especial que puede ahorrarte mucho tiempo de vacaciones. Con un guía que te acompañe, escucharás interesantes historias sobre la torre y comprenderás su significado cultural.

Cuando llegues al segundo nivel de la torre, tu punto de vista te regalará unas vistas increíbles de París. Tu guía te sugerirá los lugares perfectos para contemplar las mejores vistas de la ciudad. También puedes ver otras atracciones famosas de la ciudad, como el triunfal Arco del Triunfo, el Museo del Louvre que alberga la Gioconda de da Vinci, la titánica Torre de Montparnasse y el magnífico Grand Palais. El sereno río Sena serpentea por la ciudad. El bullicio y el clamor de París quedan muy lejos, y la tranquilidad y la calma de tu entorno son sorprendentes. Por último, puedes comprar algunos souvenirs para recordar tu visita a esta asombrosa estructura. Será una experiencia verdaderamente inolvidable y algo que atesorarás para siempre.