Descubre las mejores cosas que hacer en Venecia

¡¡¡Preciosa experiencia!!! ¡¡¡Ver el atardecer desde el campanario es una emoción única!!! Lo malo que no volveré a hacer es coger la entrada en este sitio: la entrada si la coges in situ son 10€ si la coges por internet para saltarte la cola, 16€. Me parece muy injusto.

No tuvimos que hacer cola. La visita al museo es magnífica No tuvimos guía pero todo fue muy bien.

Desde la reserva del billete hasta la entrada a los lugares de interés, todo fue fácil y sin esfuerzo. Todo fue como la seda y todas las personas que intervinieron fueron educadas y amables.

Acceso rápido y fácil a la Basílica. Uso muy sencillo y eficaz de la aplicación en teléfonos móviles. Recomiendo encarecidamente la experiencia.

La visita a la Balsílica de San Marcos y a la Plaza Ducal fue una experiencia increíble, uno de los mejores momentos de mi viaje a Venecia. Mi guía era increíblemente conocedor y tan agradable que el tiempo se me pasó volando. Hay tanto que observar y aprender que podría haberme pasado el día entero con mi guía. ¡Gracias!

Muy recomendable, breve introducción con gafas VR, luego te acompañan a la salida, el gondolero te explica algo sobre los puentes y la ciudad durante el paseo y te llevas una impresión maravillosa.

La armería era increíble. Además de ver algunos techos fantásticos, obras de arte increíbles, etc. El Palacio Ducal es sin duda vale la pena la visita.

En ningún otro lugar que yo haya visto hay tal concentración de belleza. Sencillamente, cada esquina, cada canal, cada campiello, cada palacio, cada portal, cada puente, cada calle, cada callejuela, cada patio, cada ventana en la que se posa la mirada es bella. En todas partes es bella, en todas partes la ciudad está suspendida en el tiempo, todo (excepto, la estación de tren) lo que forma parte del centro histórico en las islas de la laguna (además de Murano, Burano, Torcello...) destila belleza. Venecia también es única, sin duda, pero no "sólo" por estar suspendida sobre el agua, ni por estar suspendida en el tiempo. Venecia es todas estas cosas, pero también es increíblemente maravillosa, es realmente todo belleza. Los turistas ruidosos están ahí, San Marcos es a menudo invivible a causa de ellos, pero a menudo basta -increíblemente- con doblar una esquina para encontrarse en total silencio, a la sombra de un jardín secreto custodiado por un palacio decadente con una elegante logia medieval. Y los plácidos canales del barrio de Castello, rodeados de palacios vacíos, sin habitantes ni comercios, cuando no pasa nadie. Y los puentes solitarios sobre estos canales, y casi el desencaje de las formas elaboradas de los palacios en el agua, y el silencio no roto por las góndolas que rozan el agua, los miles de iglesias con sus fachadas singulares, los palacios restaurados o dejados en ruinas, las callejuelas sombreadas, los patios....Yo prefiero la Venecia retirada de los canales, pero hay poco que negar: incluso lo que frecuentan los turistas es bello, muy bello (y en cualquier caso, conviene repetirlo, el centro histórico es vasto y laberíntico, y a menudo en los primeros cruces no hay ni rastro de los turistas). Tantas sorpresas reveladas estrictamente caminando, tantos campielli arbolados escondidos con una atmósfera propia, tantos edificios con una arquitectura nunca vista, pero hermosos, y puestas de sol sobre el canal de Cannareggio, y vistas aéreas desde la fondamenta. Seguiría siendo necesario volver de vez en cuando, y deambular por los alrededores para satisfacer un cierto anhelo de belleza.

Saltarse la cola. Pero no nos gustó esperar a la hora de inicio que se adelantó. Aparte de eso... nos encantó nuestro guía.

Me encanta conocer a la genial Peggy Guggenheim y su mundo. Visitar su propia casa fue muy emocionante. Significa entender mejor su época y su misión. Gracias Peggy, todavía estás con nosotros.

Hermosa iglesia con mucha historia. Merece la pena visitarla si se está en Venecia. Conseguir las entradas en headout fue muy cómodo y fácil.

Estar dentro del palacio fue impresionante Encontrar la oficina de Headouts con antelación fue un poco complicado, por lo que recomiendo disponer de tiempo suficiente antes de la visita. Saltarse la cola con nuestro guía fue genial. Aunque la visita se llamaba "misterios y secretos", en realidad era sólo historia... no se desvelaron muchos secretos.

El paseo en barco, la isla de Burano y sus restaurantes. Lo que no nos gustó fue la sesión obligatoria de soplado de vidrio, ¡que ya conocíamos! Y la pausa en la isla de Burano fue demasiado corta.