Entradas Torre de Belém con audioguía

La cola era muy larga, pero mereció la pena. La fortaleza nos pareció fascinante. Prepárate para subir varios tramos de escaleras circulares, pero no estuvo mal.

Un gran lugar histórico con detalles realmente interesantes en la arquitectura del edificio.

Arquitectura y vistas fascinantes

Gran relación calidad-precio. Me encantó la Torre de Belem. Las vistas desde arriba eran preciosas

Como se esperaba Lleno de historia

Muy emocionante 🥰 Un monumento en el agua.

Agradable, pero unos pocos a la espera de la luz del sol

La Torre de Belem es uno de los lugares emblemáticos de Lisboa que hay que visitar. Independientemente de cómo se compren las entradas, es lo mismo, excepto por la visita audioguiada que se ofrece. Es una pena que a veces resulte difícil oír el audio, con el eco de las paredes rocosas y el parloteo de otros visitantes.

Llevaba una gorra de visera y, como persona alta, no vi la entrada baja a una de las habitaciones al entrar; me golpeé bastante fuerte la cabeza con la roca poco despejada. Una señal podría haber ayudado, aunque siguió siendo culpa mía. Pero me dolió.

El sitio es magnífico. Sin embargo, tuvimos que hacer cola durante más de una hora a pesar de que ya teníamos nuestras entradas...

La torre de Belém es una experiencia obligada en Lisboa, es precioso. Nosotros cogimos las entradas con audio y es un poco lioso. En ocasiones se paraba la reproducción. No me cargaba. No pude descargar el audio etc. Recomiendo coger un guia. También avisar que estuvimos DOS HORAS esperando en la cola para entrar. Horrible esa experiencia pero mereció la pena. Si cogéis el audio, empezar a escuchar en la cola (o cuando estéis en los jardines) Porque al principio del audio te explica la historia de la torre y varias estatuas de los jardines (antes de llegar a la torre).

Aunque había 2 horas de espera, ¡esperé! Me gustó ver el interior de la Torre. Tenía la grabación de audio, pero no había suficiente información antes de entrar en la torre para hacerme saber que la parte de audio tenía una cantidad significativa de información sobre la torre que debería haber escuchado antes de entrar en la Torre, por lo que fue confuso para mí, ya que esperaba escuchar información sobre lo que estaba viendo en el interior.

La Torre estaba cerrada y no había ningún cartel que indicara cuándo volvería a abrir, así que no pudimos entrar. Deberían haber colocado un cartel y publicar en Internet los horarios. Había una multitud considerable esperando el jueves después de alrededor de las 13:00 para entrar en la Torre.

La audioguía es perfecta. Te sientes como si estuvieras en el edificio y, al mismo tiempo, te guía la voz y lo único que tienes que hacer es escuchar y observar. Es 6 € más caro, pero solo tienes que comprar un billete y compartir auriculares y escuchar en el mismo dispositivo.

La entrada no reduce la cola en absoluto; ¡hay que hacer cola durante mucho tiempo, a pleno sol (ya que sólo dejan entrar a la gente de poco en poco)! Además, la espera no merece la pena: al final, el interior está bastante vacío y no hay mucho que ver; ¡la torre es más bonita desde fuera!

En general lo de casi siempre,la audioguía solo se la puede descargar el que reserve las entradas. Por otro lado compras las entradas con una hora en concreto y te da igual, tienes que hacer la misma cola de todo el mundo, aunque se tengan horarios diferentes. Mala organización, y precio elevado para no respetar ni los horarios ni las condiciones

Nos encantó la Torre de Belém, pero nos decepcionó porque pagamos unos auriculares esperando recibirlos, pero acabamos pagando y no nos los dieron.

Realmente no la hice, la cola era de una cuadra al mediodía y pensé que iba a ser algo más chico habiendo comprado por internet

Cuando entramos en la torre no había mucha gente y fue una visita muy interesante. Las vistas del Tajo son fantásticas.

La estructura era muy chula y bonita